Después de 4 meses volví a animarme a continuar con el eva Technique Impossible. Obviamente que el panorama de encontrarme con esa parte ausente era lo que más me frenaba (aparte de la falta de tiempo). Después de estar peleando un rato con una de las piezas que estaba intentando hacer, se me quebró y sali desesperado a mandarle un mail a los señores de Kotobukiya, el cual aún no han contestado, comentando mi problema y el pedido de que al menos me mandasen los datos técnicos de las piezas para poder hacerlas siguiendo las medidas originales (ya que la piezas no me las mandaban ni cagando)
después de tomarme unos mates con Nati le encaré con más paciencia y logré llegar a piezas bastante buenas. Agradezco inmensamente al capricho del destino que me llevó a tener en casa una lapicera vieja inservible del mismísimo color del plástico que necesitaba y con la forma tubular que me venía al pelo par la pieza. Una desgracia con suerte, que le dicen
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